Brasilia, 10/01/2023
El ministro brasileño de Justicia, Flavio Dino, anunció que la Policía Federal ya había identificado en diez estados del país a personas sospechosas de tener vínculos económicos con los organizadores del intento de golpe de Estado del domingo en Brasilia y dijo que ya se habían emitido órdenes de detención. Así lo informa el sitio web del diario Estadao.
Los nombres no se han hecho públicos. Los sospechosos también habrían financiado el alquiler de autobuses para trasladar a los extremistas a la capital. El ministro afirmó que la responsabilidad también recae en quienes no estuvieron presentes en los atentados: financiadores y organizadores.
Decenas de miles de personas en las calles por la democracia
Decenas de miles de personas invadieron ayer las calles y plazas de las principales ciudades brasileñas para manifestarse por la democracia, en respuesta al asalto al Congreso por parte de los partidarios del expresidente Jair Bolsonaro. La participación en la manifestación de São Paulo fue “impresionante”, informa la BBC esta mañana: parte de la Avenida Paulista, la calle más famosa del país, fue bloqueada al tráfico mientras la multitud cantaba y bailaba, exigiendo justicia.
Muchos manifestantes iban vestidos de rojo, los colores del Partido de los Trabajadores de Lula; otros agitaban pancartas que decían “No a la amnistía para los golpistas” y otros coreaban a coro “cárcel para Bolsonaro”. “No estoy de acuerdo con lo que ocurrió en Brasilia: fue una pesadilla. No estoy de acuerdo con quienes creen que se puede utilizar el poder para destruir la democracia”, declaró a la BBC Gabriel, que sólo dio su nombre de pila. “Quiero mostrar al mundo y a nuestro país que, aunque hay miles de personas que creen que las elecciones no fueron válidas, aquí en Brasil tenemos un gran número de personas que creen que pueden confiar en nuestro gobierno y en nuestra democracia”, añadió.
La polarización es un gran problema: cada uno tiene sus propias ideas y no creo que haya mucho diálogo entre las dos partes”, comentó otra manifestante, Marina Rodrigues Carmona. Ayer por la mañana, la policía comenzó a desmantelar un campamento de partidarios de Bolsonaro en Brasilia, uno de los varios que se han instalado fuera de los cuarteles del ejército en todo el país desde las elecciones presidenciales. El ministro de Justicia de Brasil, Flavio Dino, anunció anoche que hasta el momento han sido detenidas “alrededor de 1.500” personas en el marco del asalto a los palacios del poder por parte de simpatizantes de Bolsonaro el domingo en Brasilia.
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