“Las tropas aéreas y terrestres de las FDI están atacando actualmente en la Franja de Gaza”, dijeron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en un breve mensaje, señalando la escalada más seria desde la guerra de 2014.
Las imágenes parecían mostrar decenas de cohetes lloviendo sobre el enclave palestino, sin embargo, el ejército israelí aclaró más tarde que sus tropas no habían entrado en la Franja de Gaza como había afirmado anteriormente, culpando a un problema de “comunicación interna” de la confusión.
Justo después de la medianoche, el ejército había enviado un mensaje a los medios de comunicación diciendo que las tropas estaban en la Franja de Gaza, y esto fue confirmado por un portavoz del ejército. Pero dos horas después, el ejército publicó una aclaración diciendo que “no había soldados” en Gaza.
No obstante, los ataques del jueves por la noche supusieron una escalada significativa.
En una aparente referencia a la ofensiva, Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel, tuiteó: “No se ha dicho la última palabra y esta operación continuará mientras sea necesario”.
Los residentes israelíes que viven a menos de cinco kilómetros de la frontera con Gaza han recibido la orden del ejército de dirigirse a sus refugios.
El presidente de Israel condenó el jueves los disturbios masivos de judíos y árabes en las ciudades israelíes, describiendo los hechos con una guerra civil.
Joe Biden, presidente de Estados Unidos, defendió el jueves por la noche los ataques aéreos israelíes contra Gaza, afirmando que “no ha habido una reacción excesiva significativa”.
Emmanuel Macron, el presidente francés, dijo que era hora de un “relanzamiento definitivo” de las negociaciones de paz entre Israel y los palestinos.
El grupo islamista Hamás disparó el jueves un cohete de largo alcance hacia Eilat, el principal centro turístico de Israel, y según los medios israelíes, es la mayor distancia que ha recorrido un cohete de Hamás.
El misil de largo alcance cayó en la región de Hevel Eilot, próxima a Eilat, lo que planteó la necesidad de que el Estado judío ampliara su capacidad de defensa aérea en esa zona.
Además del ataque a Eilat, a 209 kilometros de la Franja de Gaza, Hamás lanzó una andanada de cohetes hacia Tel Aviv, lo que hizo que el aeropuerto Ben Gurion cancelara todas las llegadas.
Antes del presente conflicto, Israel había intentado animar a los turistas británicos a pasar sus vacaciones en las playas de Eilat y Tel Aviv.
EasyJet, Virgin y British Airways cancelaron sus vuelos hacia y desde Tel Aviv debido a la escalada del conflicto.
El jueves por la noche, British Airways dijo: “Al igual que otras aerolíneas, hemos cancelado nuestros vuelos hacia y desde Tel Aviv. La seguridad de nuestros colegas y clientes es siempre nuestra máxima prioridad, y seguimos vigilando la situación.”
El personal de la aerolínea dijo que intentaría reorganizar los vuelos u ofrecer reembolsos.
Israel se prepara para la guerra
Es la escalada más grave desde la guerra de Gaza de 2014 -que dejó 2.251 palestinos muertos y 73 israelíes- y con el conflicto que no muestra signos de alivio Israel dijo que estaba masificando las tropas a lo largo de la frontera de Gaza y llamando a 9.000 reservistas antes de una posible invasión terrestre.
Los mediadores egipcios se apresuraron a acudir a Israel para tratar de lograr un alto el fuego, pero no dieron señales de progreso.
Funcionarios israelíes afirmaron que el grupo islamista Hamás debe recibir un fuerte golpe disuasorio antes de cualquier alto el fuego, y las imágenes mostraron oleadas de morteros aterrizando en el enclave densamente poblado justo después de la medianoche del viernes.
Por su parte, un brazo armado de Hamás advirtió el jueves por la noche que “cualquier incursión terrestre en cualquier parte de la Franja de Gaza provocará un aumento del número de muertos y prisioneros del lado enemigo”, mientras el grupo seguía lanzando cohetes hacia el centro de Israel.
Al mismo tiempo, Israel seguía bombardeando objetivos de Hamás en Gaza, el número de muertos palestinos se elevó a 87, entre ellos 17 niños, mientras que en Israel han muerto siete personas, entre ellas un niño de cinco años.
“Las FDI ya han atacado cientos de objetivos y pronto superaremos los 1.000. Seguimos golpeando a Hamás mientras defendemos a nuestros ciudadanos”, dijo Netanyahu, mientras inspeccionaba el jueves un sistema de defensa antimisiles Cúpula de Hierro.
“Llevará tiempo, pero con gran decisión, tanto defensiva como ofensiva, lograremos nuestro objetivo: devolver la tranquilidad al Estado de Israel”.
Por otra parte, Reuven Rivlin, el presidente israelí, condenó enérgicamente los disturbios protagonizados por extremistas árabes y judíos en todo el país, que han provocado al menos 400 detenciones, y comparó la situación con una “guerra civil”.
Estamos asistiendo a un linchamiento
Un ataque en Bat Yam que fue transmitido en vivo por equipos de televisión israelíes mostró a una turba judía arrastrando a un hombre, que creían que era palestino, fuera de su coche antes de golpearlo severamente.
“Estamos viendo un linchamiento en tiempo real”, dijo un reportero de televisión fuera de cámara en las imágenes.
En la ciudad septentrional de Tamra, un hombre judío fue atacado por una turba árabe que estuvo a punto de incendiar su coche cuando aún estaba dentro. Los paramédicos israelíes dijeron que también fue apuñalado, pero ha sobrevivido a la prueba.
Otros ataques se están extendiendo por todo el país, incluyendo Haifa y Acre en el norte, así como Lod, Jaffa y Tiberias.
“Muerte a los árabes” se coreó en varias concentraciones durante la noche, mientras que en Jerusalén un hombre árabe fue apuñalado frente al famoso mercado de Mahane Yehuda, en la parte occidental de la ciudad.
Netanyahu planteó el despliegue de tropas en las ciudades afectadas por los disturbios, y prometió el jueves conceder a la policía nuevos poderes para detener sin cargos a los presuntos alborotadores durante un periodo prolongado.
“No hay mayor amenaza ahora que estos pogromos, y no tenemos más remedio que restaurar la ley y el orden mediante el uso decidido de la fuerza”, dijo. “Nada puede justificar que una turba árabe agreda a los judíos, y nada puede justificar que una turba judía agreda a los árabes”.
Los disturbios se intensifican
Los disturbios en Israel se han agravado tanto que se teme que acaben eclipsando el conflicto de Gaza.
Un jefe de la policía israelí comparó el miércoles los disturbios en Lod, en el centro de Israel, con los disturbios árabes que precedieron a la Segunda Intifada, un levantamiento palestino masivo.
El jueves también se supo que Estados Unidos ha aumentado la seguridad en su embajada en Jerusalén, donde había una importante presencia policial en las calles, incluyendo agentes armados y montados.
A lo largo del día, las sirenas antiaéreas sonaron en todo Israel, incluso en Tel Aviv, donde se cerró el aeropuerto Ben Gurion y se desviaron los vuelos.
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